Escucha atentamente los dichos de los sabios y abre tu mente a mi experiencia. (Proverbios 22:17)
El propio libro de Proverbios en 26:12 indica: «¿Has visto a un hombre sabio en su propia opinión? ¡Más esperanza hay del necio que de él!» Ambos versículos tienen algo en común, la necesidad de abrirnos al aprendizaje, estar sensibles y disponibles para que otras personas nos puedan ayudar a ver aquellas partes de la realidad que nosotros no podemos percibir, que se escapan de nuestra habilidad. Esto es algo que como seguidores de Jesús deberíamos de cultivar tanto a nivel personal como comunitario. El «aquí las cosas siempre se han hecho así» mata nuestra capacidad de aprendizaje y nuestra creatividad, pero también la posibilidad de experimentar a Dios obrando en nuevas dimensiones.
¿Cuál es tu actitud hacia el aprendizaje?
Felix Ortiz