A la edad de 91 años, Katherine creó una cuenta de Instagram con el propósito de difundir el Evangelio y enseñar a las personas sobre el amor de Dios, especialmente en los momentos más difíciles de la vida.
Hasta su último aliento, mujer de 91 años comparte el Evangelio con alegría y audacia, «Mi salud decae, mi fe no»
Imagen: Instagram.
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Tras la muerte de su esposo hace 15 años, se sintió sola y reflexionó sobre el propósito de su existencia. Con el tiempo, surgió en ella un fuerte deseo de compartir la fe en Jesús con su familia y con el mundo.
“Quiero compartir mis pensamientos y testimonio de mi Salvador. Tengo muchos años para desarrollar estos sentimientos y mi fe y quiero compartirlos con mi familia y otras personas. Espero que esto te resuene”, declaró en Instagram.
Con la colaboración de su hija, empezó a filmar videos en los que comparte pensamientos basados en la Biblia sobre esperanza y motiva a los espectadores a seguir a Jesús.
«Si 50 personas vieran esto, sentiría que fue un éxito», dijo.
Sus videos han superado el millón de visualizaciones, lo que la llevó a reconocer que había experimentado un «milagro de Dios». En la actualidad, su perfil de Instagram ya ha conseguido 150 mil seguidores.
El impacto de su contenido ha inspirado a muchas personas, brindándoles sensaciones de paz y esperanza. Katherine expresó su asombro al notar la cantidad de individuos que se ven conmovidos por su historia personal.
En un video, ella contó que aceptó a Jesús cuando era joven y compartió recuerdos de su infancia. Habló de cómo se maravilla de que Dios la haya encontrado en un lugar remoto y haya respondido todas sus preguntas.
“Es fácil pensar que estamos lejos y que somos demasiado pequeños o sin importancia para que Dios se preocupe por nosotros y nos encuentre, pero ese es el milagro de un Padre amoroso que se preocupa por cada uno de sus hijos y nos conoce”, expresó.
En septiembre de 2023, Katherine reveló tener problemas de salud, sin embargo, sigue predicando con entusiasmo la Palabra de Dios. A pesar de haber pasado por momentos difíciles y haberse enfrentado a la posibilidad de someterse a un procedimiento para «reparar» su corazón, finalmente acepta que ese no era el plan que Dios tenía para ella.
“Hoy quiero compartirles que mi paz proviene de mi Salvador, Jesucristo y su plan para nuestra felicidad. Siento alegría al saber que incluso cuando deje esta vida, volveré a ver a mis seres queridos”, dijo.
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En ese período, Katherine descubrió que perseverar hasta el final puede implicar aceptar la voluntad de Dios en ciertas ocasiones.
“Incluso en estos últimos días de mi vida en esta Tierra. Estoy aprendiendo a utilizar los días buenos para seguir teniendo un propósito y ver la belleza y animarme a mí y a los demás. Sé que Él no quiere que me quede sentado esperando morir. Esto no es perseverar hasta el final”, testificó ella.
“Podemos tener paz incluso cuando parezca que las cosas se están desmoronando. Me da esperanza saber que el Salvador me ama. Espero que esto también les traiga esperanza”, concluyó.